Operan a mi papá, es una operación de alto riesgo y aunque sé que todo va a salir bien, porque tiene que salir bien, no dejo de preocuparme y sentir nervios y miedo a la vez.
Son de esos momentos que nunca esperas y que cuando los ves cerca te pasa todo por la cabeza.
En mi recuento creo que me falta decirle a mi papá muchas cosas.
Que lo quiero un chorro, que estoy preocupadísima por él (aunque no lo dices nunca para tratar de verte un poco más fuerte), que le agradezco millones de cosas, y sobre todo el apoyo que he recibido desde que nos conocemos. Mi vida no sería igual y definitivamente no sería la de ahora sin él en ella, gracias a él tengo miles de cosas sin las que no me concibo completa, entre ellas mi hermana, mi luz completa...
Siempre he pensado que los seres humanos cometen un enorme error al no decirle a sus seres queridos que son importantes en su vida, que los ama, que los extraña, que los necesita... Y hoy soy parte de ellos...
Hoy creo que se llama estupidez, no debería suceder, nunca sabes qué pueda pasar el día de mañana, ni el día de hoy, ¿y si no les he dicho que los amo las veces suficientes que ellos lo han necesitado?
Además de la estupidez, lo que más me inunda hoy, se llama miedo...