Wednesday, November 26, 2008

Una mujer y un hombre


Una mujer y un hombre llevados por la vida,
una mujer y un hombre cara a cara
habitan en la noche,
desbordan por sus manos,
se oyen subir libres en la sombra,
sus cabezas descansan en una bella infancia
que ellos crearon juntos, plena de sol, de luz.

Una mujer y un hombre atados por sus labios
llenan la noche lenta con toda su memoria,
una mujer y un hombre más bellos en el otro
ocupan su lugar en la tierra.

-Juan Gelman

Muchas lunas, una completa...

Thursday, November 13, 2008

"Se trata de sumar...

... y no de restar", fueron de las ùltimas palabras que intercambiamos mi amigo Nemesio y yo, la ùltima noche de bar, antes de despedirnos de Ciudad Real, en mayo pasado. Tambièn prometimos vernos pronto, pero pasaron casi seis meses para volvernos a ver. Fue un encuentro ràpido, pero quedamos de vernos, esta vez con fecha en el calendario, y asì fue, lo cumplimos esta semana.
En el viaje me llevè bien con todos, pero es curioso còmo Nemesio y yo fuimos màs afines y por mucho. Èl es como 20 años mayor que yo, incluso en medio de nuestra plàtica filosòfica por las Españas, me decìa que èl era de la edad de mi papà y que se sentìa rarìsimo de intercambiar consejos sentimentales conmigo.
Nos volvimos confidentes, no sè quièn de los dos hablò màs, pero fue lo suficiente para contar lo que en ese momento importaba de cada lado y salimos contentos del bar con la promesa de vernos en el regreso a Mèxico y ser amigos para siempre.
No nos vimos pronto, pero la espera valiò la pena. Despuès de una muy buena cata de vinos de Jerez, nos quedamos en compañìa de unos pacharanes que se quedaron velando la plàtica por varias horas. Intentamos despedirnos desde la una de la mañana, pero eso sucediò hasta las 4:15.
Tenìamos que ponernos al tanto de las vidas y no nos fuimos hasta terminar. Hablamos tanto que tengo todo y nada para contar, hasta resultò ser excompañero de trabajo de mi papà. Ninguno de los dos podìa creer la coincidencia. El mundo es muy pequeño, por eso uno no se puede portar mal...
Fue una plàtica muy entretenida y terapèutica. Nos hemos visto tres veces y me siento muy feliz de tener anècdotas maravillosas què contar en tan poco tiempo de convivencia.
Èl es un hombre hecho y sobre todo muy derecho, nos hace mucha gracia nuestra amistad con 20 años de diferencia, y yo me siento afortunada de poder aprender tanto de su sabidurìa y filosofìa de vida.
Otra vez prometimos vernos pronto, ahora en compañìa de mis padres, espero que esto sì suceda en el tiempo planeado.

Esta semana ha sido terapèutica en muchos sentidos, desde mi bordado avanzado, que tanta sorpresa les ha causado a muchos, hasta dos de las tres veces que rechacè ir al concierto de Alejandro Fernàndez. Creo que todavìa no puedo creer que lo hice en el lapso de una semana, y no es que me sienta orgullosa, morìa por ver a Alejandro, pero sabìa que no hacìa lo correcto y no me arrepiento, creo que decidì lo mejor y hasta eso fue terapèutico.

Vengo de una salida con dos de mis mejores amigas. Y aunque no recordamos viejos tiempos, porque habìa mucho nuevo que contar, yo sì me sentì igual de feliz y afortunada que siempre de tenerlas en mi vida y de poder seguir pasando momentos como èste, me hicieron reìr como hace mucho no lo hacìa.
Siempre he presumido de haber construido bases tan sòlidas con mis verdaderos amigos, que sin importar cuànto tiempo estemos sin vernos, el dìa que nos volvemos a ver resulta como si nos hubièramos despedido ayer. Amo saber que no me equivoco y agradezco infinitamente el seguir teniendo a mi lado gente tan valiosa y tan importante para mi vida.

Yo que vivo la mitad de mi vida en la planeaciòn y la predicciòn, puedo decir que no sè què va a pasar mañana y ya no me importa, hoy me siento muy feliz. Por favor que esto dure mucho y que ya sea lunes, las cosas pintan bien...
Ahora a dormir que mañana me tengo que levantar temprano para llegar puntual a mi desayuno con màs gente que me da mucho gusto ver.

¡Buenas y felices noches!

Friday, November 7, 2008

¡Los Cadillacs tocando para DOS!

Pues se me hizo.
No llegar a la hora exacta al punto del avionazo hizo que pudiera ir, no sólo a uno, sino a los DOS conciertos de los Cadillacs!
Recuerdo que a las primeras personas que les conté que me quedé a cuatro cuadras del accidente, me dijeron que todavía no había cumplido mi misión.
Después de los conciertos, estoy segura que sigo sin cumplirla, porque estoy escribiendo esto, pero lo que sí cumplí fue el sueño de ver a los Cadillacs. Así que canté y bailé como si nadie me viera.
El miércoles fue un momento que esperé por mucho tiempo, moría de ganas de verlos en vivo, jamás he esperado tanto por algo que me emocione, y lo lograron hasta las lágrimas, sentí mariposas en el estómago, la música me retumbaba en el pecho provocándome sentimientos indescrptibles y mi sonrisa resultó imborrable con todo y que no tuve todo lo que me hubiera gustado. Pero Vicentico resultó la mejor medicina, al final hay males que necesitan una pequeña dosis de lo mismo para encontrar el antídoto o la cura.
El jueves fue una promesa cumplida, y no pudo ser de mejor manera... Lo calificaría como un concierto redondo. Ver el mismo show dos veces podría parecer aburrido para muchos, pero ni fue el mismo ni se sintió igual. Lo viví completamente distinto, lo disfruté de otra manera y hasta me di el lujo de ir a comprar alcohol cuando cantaron Vasos Vacíos, pues extrañé a Celia Crú desde el día anterior y está lejos de ser mi rola favorita.
Puedo decir muchas cosas de los dos conciertos, pero en este momento que me estoy jeteando con las desveladas de toda la semana sólo diré:
-Gracias por los boletos.
-Gracias por la compañía.
-Son los conciertos que más significado han tenido en mi vida.
-Del miércoles me quedo con Demasiada Presión, El Aguijón, y Calaveras y Diablitos.
-Del jueves, Siguiendo la Luna y Satánico Doctor Cadillac, de la cual terminamos coreando ¡los Cadillacs tocando para DOS!
-Y de los DOS, me llevo Vos Sabés...

Tuesday, November 4, 2008

Cuando no te toca

Estoy en shock...

Vengo de pasar hora y media en el tràfico. Sabìa que me tocarìa como cuando tomaba ese camino de regreso de la universidad hace unos años. Me habìa "preparado" psicològicamente y con todo y eso hice corajes por coches que me bloquearon el paso varias veces sin que fuera su turno en los semàforos. Monte Lìbano, antes de cruzar Palmas, estaba hecho una groserìa, pensè en tomar otros caminos, pero sabìa que si superaba un cachito de èse podrìa tomar un atajo màs "alivianado" por el hospital de Perinatologìa en Virreyes, para salir a Perifèrico.

Me detuve en Explanada para comprar una deliciosa baguette de jamòn ibèrico, en el Eno, para cenar, pero no tuve suerte, se habìa acabado todo.
Me fui resignada, lleguè a la esquina de Virreyes y Prado, vi que habìa tràfico en la calle para tomar mi atajo, me detuve dos segundos para pensar en una nueva vìa y... como de pelìcula, una "avioneta" en caìda libre y unos segundos màs tarde una explosiòn enorme, impactante. Mi ventana estaba abajo y sentì el calor en la cara... doblè a la derecha inmediatamente, direcciòn opuesta al accidente, no sabìa hasta dònde llegarìa el fuego... despuès una cortina de humo avisaba que no llegarìa màs lejos, al mismo tiempo la zona quedaba en penumbra.

Mi primera reacciòn fue marcar a la redacciòn del periòdico para avisar, despuès pensar en personas queridas que pudieran estar cerca, afortunadamente ninguna estaba en peligro.

En la redacciòn me pedìan una ubicaciòn, pero la "avioneta" se me habìa perdido entre los edificios, asì que declarè que por el lugar en que la vi en caìda libre y el calor que sentì en la cara por la cercanìa, tenìa que haber sido por la Fuente de Petròleos.

Salì por otro camino improvisado y busquè noticias, obvio me asustè muchìsimo cuando me enterè que la ubicaciòn del accidente era justo por donde yo pretendìa salir con mi "atajo"...

Ya cerca de mi casa recibì la llamada de mi madre...
-¿Dònde estàs? ¿Viste lo que pasò?
-Sì mami, lo acabo de ver...
-Sì, yo tambièn, en televisiòn
-Yo en vivo ma...
-¡¿Còmo?!
Y bueno... ya sabràn, ella hubiera imaginado TODO, menos que a mì se me habìa ocurrido ir ese dìa a la universidad para checar unos tràmites.

Ya en mi casa recibo la llamada de mi pequeña hermanita para preguntarme por lo que habìa visto.
-Gaby, cuèntame, ¿còmo se viò el fuego?, ¿como algo nuclear?
-Pues espero que nunca me toque ver una explosiòn nuclear o no podrìa contàrtelo princesa
Esto es sòlo un poco de lo que la niña preguntò, pero siendo fanàtica de la ciencia ficciòn desde siempre, se podràn imaginar lo demàs.

Sigo con dolor de estòmago, màs cuando veo las imàgenes transmitidas en TV y las que mi crestomatìa mental me regala.
Pienso una y otra vez en lo ùltimo que sintieron quienes viajaban en el jet, y quienes esperaban en el tràfico o caminaban justo por ese lugar, en ese momento.
Tampoco puedo dejar de pensar en què hubiera pasado si no me hubiera quedado platicando con Rodrigo en la universidad, alrededor de 15 minutos, si no se me hubieran atravesado algunos coches que me hicieron rabiar, o si no hubiera pasado al Eno con mi antojo enorme de la baguette de jamòn ibèrico. Què bueno que no la comprè porque creo que el hambre no regresarà pronto.


Como dice mi amigo Veselin, cuando no te toca, aunque te pongas, y cuando te coca, aunque te quites...
Indudable el angelote que me cuida.

Justo empecè esta semana con algunas malas noticias del fin que me hicieron reflexionar una vez màs sobre la vida que tenemos prestada, ¿por cuànto tiempo?, si lo supièramos creo que vivirìamos de otra forma o por lo menos serìamos màs cuidadosos con lo que realmente importa.

Such is life... and death